Entrevista a Cristian Blanco

25/01/2023

Hoy os traigo una nueva entrevista. En esta ocasión me he lanzado a interrogar, para conocerlo un poco mejor, a Cristian Blanco (podéis encontrarlo en Twitter como @cblancowriter), nacido en Barcelona en 1983, criado en Santa Coloma de Gramenet y residente actualmente en Mataró. Trabaja en el departamento de contabilidad de una empresa y en sus ratos libres se dedica a escribir (casi siempre del género de terror) o a relajarse leyendo, viendo series de televisión o dando paseos por el campo (o por la ciudad, si no hay más remedio).

Le gusta la música power metal y el punk, pero es de los que escribe en completo silencio porque, si no, se distrae fácilmente.

Sus mayores influencias son Stephen King, Agatha Christie, Clive Barker, Peter Straub, Garth Ennis y George R.R. Martin. También disfruta con Robert Silverberg o Alberto Vázquez Figueroa, entre muchísimos más.

A sus espaldas lleva la publicación de un par de novelas (entre ellas El destino de Paracelsus, a la que dediqué ESTA RESEÑA) y un buen número de relatos. ¿Comenzamos con las preguntas?

Fotografía de Cristian Blanco
Con esta foto podréis ponerle cara al protagonista de esta entrevista

Para romper el hielo, cuéntanos de forma rápida quién es Cristian Blanco.

Un tipo sencillo, aficionado al terror y lo extraño en sus diversas facetas. Escritor por vocación placentera y no económica, si no ya me habría retirado hace tiempo.

Al trabajar en el departamento de contabilidad de una empresa se podría suponer que lo tuyo son los números. ¿Cómo se pasa de controlar cifras a dominar el arte de la palabra escrita?

Curiosamente no era precisamente el mejor en matemáticas así que quizás lo raro sea que me dedique a los números. Los idiomas se me dan bien y siempre he sido un niño imaginativo, aunque muy tímido, con lo que escribir es una forma de dar rienda suelta a mis sueños, pesadillas o paranoias que se gestan en mi mente.

La novela corta El destino de paracelsus es tu último trabajo, pero antes has publicado bastantes relatos y otra novela, La llamada de la luna. ¿Eres más de formato corto o prefieres trabajos más extensos?

Como lector, suelo preferir novelas, aunque también leo antologías y las disfruto.

Como escritor, me gusta intercalar la escritura de relatos entre novelas para no oxidarme y tampoco forzar una nueva novela.

Esta web se llama De terror y fantasía, géneros que, por lo que veo, también encajan con tu perfil. ¿Qué te atrae de ellos?

Cómo he comentado antes, siempre me ha atraído el terror y lo extraño, ya de pequeño empecé viendo películas protagonizadas por Vincent Price y fueron una puerta a un mundo que me resultó maravilloso. Luego pasé a R.L. Stine, de adolescente a Stephen King y ya no pude parar. La fantasía también me gusta, aunque es un género que me entra mejor de forma visual (formato serie o película) o quizás mejor en cómic que en novela.

¿Cómo ves el panorama en el género, tanto a nivel general como nacional?

La fantasía la veo más viva que nunca, cada vez es un género menos de nicho (o la gente se avergüenza menos de admitir que la lee) y me da la sensación de que es un género que vende mucho. A nivel nacional, pues ya sabemos que hay las tiradas que hay, al menos cada vez veo a más editores y lectores que apuestan por autores de aquí.

El terror siempre tiene tirón en el cine, ya que es barato y tiene una gran legión de espectadores. En literatura, a excepción del maestro King, siempre es el género más olvidado. No sé si es que entre los espectadores de cine de terror no hay mucha afición a la lectura o realmente somos menos de los que pensamos. También es cierto que hay autores internacionales que poco a poco se van haciendo un hueco en nuestro país, ojalá sirva para que lleguen más y para que se publiquen más autores españoles.

«Aprovecho para hacer una reivindicación sobre una situación que quiero pensar que cada vez se da menos: ir a una librería, leer la sinopsis de algún libro, ver que tiene toda la pinta de ser de terror, pero esconden esa palabra como si fuera tabú y te ponen eufemismos como thriller, tensión y demás».

Cristian Blanco

Antes he mencionado tus relatos, muchos de ellos publicados en la revista Círculo de Lovecraft. ¿Qué valor crees tú que tienen este tipo de publicaciones?

Para los autores tiene muchísimo. Primero, es una forma de escribir relatos sobre un concepto, por lo que nos obligamos a ejercitar los músculos cerebrales. Segundo, el ego, por supuesto. No por creernos los mejores, sino por saber que algo nuestro ha gustado lo suficiente a alguien para ser publicado.

Para los lectores, descubrir a autores cuya forma de escribir o sus historias pueden atraerte. Más revistas de terror, por favor y gracias.

Centrémonos ahora en El destino de paracelsus. Se trata de una historia de superhéroes, algo muy común en formato cómic pero no tanto en novela. ¿Cómo surge la idea?

Todo empezó por una convocatoria de novelas cortas de la editorial Cazadores de ratas. El máximo eran 24000 palabras y el tema, brujería o brujas, no lo recuerdo bien. En ese momento pensé que la gran mayoría de personas escribirían una historia de terror o fantasía y, dada la popularidad del cine de superhéroes, quise mezclar ambos conceptos. El cine de superhéroes me gusta, aunque ahora esté un poco saturado, y también leo cómics del género de vez en cuando, así que era un tema que me atraía. Dada la extensión citada, no podía perder el tiempo en reflexiones y debía ser una novela llena de acción y que contara una historia de principio a fin, por lo que concebí El destino de paracelsus como la típica película de orígenes de superhéroes. Aparte de los evidentes guiños al mundo superheroico, también mezclé conceptos de brujería y familias de brujos que le daban el toque oscuro que me gusta dar a todas mis obras.

La llamada de la luna está publicada con editorial, mientras que El destino de paracelsus es una obra autopublicada (en la que tuve el placer de trabajar como maquetador). Cuéntanos, ¿cómo fue tu experiencia al respecto? ¿Se lo recomendarías a otros autores? ¿Qué diferencias destacarías entre ambos métodos de publicación?

Lo bueno de autopublicar es, en parte, lo mismo que lo malo: el control absoluto está en tus manos. Se requiere una inversión económica para que tenga unos baremos de calidad (salvo que seas un hacha maquetando o corrigiendo, cosa que no es mi caso) y es un proceso en el que estás más encima, por lo que es muy satisfactorio en ese sentido. Por comodidad, evidentemente por editorial tradicional es más sencillo, pero dependiendo de la editorial, tienes mucho menos que decir en cuanto a maquetación, estilo de la portada, etc. En mi caso tengo muchas novelas escritas y gran parte de ellas, por no decir todas, no verán la luz si no me autopublico, así que como tampoco tiene ningún sentido que languidezcan en un cajón, prefiero optar por autopublicarme.

Mi recomendación a cualquier autor es que intente entregar el mejor producto posible (cosa que yo no he hecho siempre por inexperiencia, por ejemplo), que pruebe enviando a editoriales, que se cuide mucho de coediciones o editoriales que pidan pasta por publicar y si quiere que su historia vea la luz, autopublicar es una opción muy digna. Nadie es peor por autopublicar y, salvo que seas un escritor TOP, las regalías no te sacarán de pobre tampoco.

Montaje con las cubiertas de La llamada de la luna y El destino de Paracelsus
Estas son las cubiertas de las dos novelas publicadas por Cristian. Tanto La llamada de la luna como El destino de Paracelsus pueden comprarse en Amazon.

Ahora que acabamos de comenzar el año, ¿qué planes, objetivos y retos te planteas para este 2023?

Mi plan primordial es terminar de escribir la novela corta que termina la trilogía (sin publicar) de misterio que he estado escribiendo este último año y medio. Me siento orgulloso ya que, por primera vez, me he sumergido en un género que sólo había tocado como espectador, y he terminado tres novelas sobre la misma historia. Es cierto que son cortas las tres, pero he disfrutado mucho escribiéndolas.

Una vez termine esta novela y le dé la primera corrección antes de registrarla, tengo varios planes. He enviado un par de manuscritos a editoriales y como soy de naturaleza pesimista, ya estoy calculando para marzo corregir por enésima vez una de ellas ya que no creo que la elijan para publicar e intentaré autopublicarla (ya hablaremos). Esa novela es de fantasía y disfruté mucho escribiéndola, así que espero que guste a la gente. Una vez la autopublique, intentaré autopublicar también la primera parte de la trilogía de misterio a mediados/finales de año.

También tengo otras novelas que debían salir por editorial, pero las cosas de palacio van muy despacio y ya veré que hago en el futuro. En cuanto a escritura, aparte de correcciones, puede que me dedique a escribir relatos de terror (ya tengo un par de ideas) salvo que la inspiración me golpee para escribir una novela. En todo caso, procuraré estar ocupado literariamente hablando e ir vaciando el cajón, aunque solo sea para tener las novelas en mi estantería y ver que el trabajo no se queda simplemente como un Word en el PC.

Aquí ponemos el cierre a la entrevista, deseándole a Cristian la mejor de las suertes en todos sus proyectos, tanto actuales como de futuro. Además, quiero aprovechar estas líneas para dejar constancia de que su anterior novela, La llamada de la luna, está entre mis lecturas pendientes para este año. ¡Nos vemos!